Preocupa enormemente al ministro de Defensa -y antiguo alto cargo de empresas privadas fabricantes de armas- la "bajada en la intensidad del sentimiento" nacional entre los españoles e insiste, con ello, en la importancia del desfile militar del 12 de octubre como tradición que, como tal, ha de ser respetada. Llama la atención que ahora vengan nuestros gobernantes a hablarnos de patriotismo cuando son ellos quienes cedieron hace tiempo la soberanía nacional a los grandes poderes financieros e industriales de Europa, cuando redactan leyes que permitirán el traspaso de patrimonio nacional a manos privadas, cuando no hacen nada para evitar que las grandes fortunas -en otra muestra de fervor patriótico- se establezcan en estados extranjeros donde pagan menos impuestos.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario